No es necesario destacar la relevancia esencial de la función de control en las actividades de la Hacienda Pública, al respecto CAYETANO A. LICCIARDO indica “En la hacienda pública, el control es una función que hace al ejercicio del poder. Está vinculado al cumplimiento de la voluntad del Estado, cuya misión –agrega– no es operar para sus miembros, como lo hacen las familias, sino para el bien común, es decir, para crear las condiciones necesarias a fin de que los individuos y las familias puedan desarrollarse en libertad”. El control en el sector privado protege intereses particulares, pero en el ámbito de la Hacienda Pública, adquiere características distintas, que conforman un sistema específico de control para el sector público, teniendo presente que el control de la Hacienda Pública sustituye la ausencia del interés particular, es de decir viene a proteger los intereses de la sociedad, según el Dr Cayetano A. Licciardo.
Es necesario tener presente que, en el caso de los fondos públicos, el control tiene como propósito fundamental evaluar las actividades que desarrollan las entidades públicas y los recursos que utilizan, a efecto de determinar si los utilizaron con eficiencia, eficacia, economicidad, calidad y cumpliendo el marco legal. Se dan distintos tipos de control en el sector público como el control de la junta directiva, control gerencial, control operativo. Es importante señalar que el control es responsabilidad de todos niveles jerárquicos y funcionales de una entidad y no es una responsabilidad exclusiva de la auditoría interna.
Las actividades de control son realizadas en primera instancia por la Contraloría General de la República, y el artículo 12 de su ley Orgánica establece que “La Contraloría General de la República es el órgano rector del ordenamiento de control y fiscalización superiores…” Asimismo es un órgano auxiliar de la Asamblea Legislativa en la fiscalización de la Hacienda Pública, como está establecido en la Constitución Política. También las Auditorías Internas son fundamentales en el control de la de Hacienda Pública y el nivel de junta directiva, gerencial y todos los funcionarios públicos, así como la sociedad civil. Se da también el control político que realizan las comisiones legislativas. Se dan situaciones como el “Cementazo”, el caso “Cochinilla”, el Caso “Diamante”, y recientemente el caso del Banco Nacional.
Los mecanismos de control de la Hacienda Pública no funcionaron adecuadamente y fue la prensa, la sociedad civil, entre otros, los que detectaron las anomalías, y muchos otros casos, donde el daño a la hacienda pública y al medio ambiente ya no se pueden reparar. Es importante señalar que en algunos casos las auditorías internas, señalaron deficiencias, pero no contaron con el apoyo del nivel superior. No existe clara conciencia de las juntas directivas y nivel gerencial sobre la importancia del sistema de control interno y el plan presupuesto para mejorar accionar institucional y enfrentar la corrupción.
Me parece que en algunos casos no hubieron adecuados manejo del riesgo especialmente el riesgo financiero y otros. El Riesgo de Crédito en el caso del “Cementazo” y en los casos “Cochinilla”, “Diamante” y el de Banco Nacional Riesgo Operacional. Se denomina Riesgo Operacional a “toda posible contingencia que pueda provocar pérdidas a una empresa a causa de errores humanos, de errores tecnológicos, de procesos internos defectuosos o fallidos, o a raíz de acontecimientos externos como fraudes, accidentes, desastres”.
Me parece que no solo son aspectos de control en los casos de corrupción, malversación de fondos, tráfico de influencias, faltas al deber de probidad, sino que los funcionarios públicos deben actuar con ética con valores como la honestidad, transparencia y responsabilidad.
Consultor
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Lic. en Administración de Negocios
Universidad de Costa Rica
Contador Público Autorizado.
